Queridas lectoras,
estimados lectores, hace 18 años empecé a publicar en la Sección Cultural de
Por Esto! de Quintana Roo y, el día de hoy, como acontece en el tiempo circular
maya, cierro un largo ciclo y me despido de ustedes. Durante este tiempo,
publiqué un poco más de 1 200 artículos, ensayos, cuentos, investigaciones, entrevistas,
reseñas, poemas y crónicas. Me congratula saber que este ejercicio intelectual
ha servido a algunos lectores para interesarse, entusiasmarse y profundizar en
el conocimiento histórico y científico.
Aquí nació mi amigo
imaginario, El Astrónomo Cangrejo Emiliano, lo considero mi amigo, aunque a él
no le caigo bien. En este espacio y con la columna “Del Big Bang a tus
pensamientos” me formé como investigador. Compartí con ustedes mis deconstrucciones
y propuestas históricas, las cuales, al republicarlas en mi Blog, con los años
me permitió difundir mi trabajo internacionalmente y he tenido el honor de ser
invitado a dictar conferencias en universidades, museos, foros turísticos y
festivales de Canadá y Colombia.
En una ocasión les sugerí
que indagáramos en la lectura de los glifos mayas y así conocimos su belicoso
cotidiano, penetramos en su pensamiento, descubrimos su religión chamánica,
comulgamos con su otredad. Más tarde viajamos por los confines del cosmos y
recorrimos el jardín subatómico para reconocernos polvo de estrellas
concentrado por un instante en la inmensidad.
Recuerdo con alegría las amenas
discusiones con los compañeros Zita Finol, Raúl Espinosa y Juan José Morales,
colaboradores de este diario y entrañables amigos que se nos adelantaron en el
camino; larga vida a su memoria. Agradezco a mi editora, Jazmín Pacheco, por su
paciencia y solidaridad. Extiendo un abrazo fraternal a Víctor Hugo Guzmán. Gracias
Carlos Torres por guiarme y alentarme en mis inicios. Me reconozco privilegiado
de la lectura que otorgan a mis artículos los integrantes de las comunidades
mayas. Los invito a seguir compartiendo la riqueza histórica que nos pertenece
a todos por igual en mis espacios de las redes sociales.
Agradezco la oportunidad
que tuve para colaborar en el periódico de mayor circulación y lectura en el
Estado de Quintana Roo, aprecio que lo hice siempre con la más amplia libertad
de expresión.
Toda despedida conlleva
una sensación de nostalgia y una dosis de tristeza, sin embargo, me voy también
con la sensación de haber cumplido con una labor de difusión cultural para mi
comunidad. Gracias queridas lectoras, estimados lectores de Por Esto! de
Quintana Roo.
Claudio Obregón Clairin