La Mente de las Cavernas

Los seres humanos somos un suspiro evolutivo que adquirió conciencia y la realidad última es que tenemos conductas espirituales y animales que dan forma o transfiguran nuestra existencia.

Nuestras capacidades energéticas y de espiritualidad son realmente infinitas, sin embargo, somos un claro ejemplo de la "Unidad" en las contradicciones y, como si fuera un implante de voluntades ajenas a nuestra felicidad, respondemos a nuestro entorno buscando absolutos, el bien sobre el mal y la producción a partir de la inequidad...  somos cómplices del caos.

También somos una Inteligencia de Grupo, muy pocos de los que estamos leyendo el periódico conocen la técnica para elaborar el papel pero contamos con un ejemplar en nuestras manos gracias a la inteligencia "del otro" que logró fabricar el primer papel y lo transmitió a los demás surgiendo así la especialización y su consecuente perpetuidad; hoy en día leemos el periódico sin conocer cómo se elabora o nos subimos a un avión sin tener la menor peregrina idea de cómo vuela; somos, ante todo, el resultado de la inteligencia registrada en la Historia.

En la antigüedad de las cuevas, las sociedades humanas se regían sobre códigos de conducta, tabúes  y una empatía con la naturaleza que pareciera lejana y oculta pero en realidad están presentes en nuestras conductas de manera directa o transfiguradas. Cuando surgió la agricultura se sumaron el machismo y las contradicciones de las Religiones de Estado.

Veamos algunas de esa Grafías Invisibles...

¿Cómo es posible que dos y hasta tres mujeres puedan hablar al mismo tiempo y "logran entenderse" y por qué algunos hombres pueden ser productivos en el trabajo a pesar de no dirigirse la palabra y apenas la mirada?

En la sociedad de las cuevas, los hombres se ausentaban por periodos largos acechando a su presas, las mujeres se quedaban en la oquedad de las cuevas,  al resguardo y formación de los hijos.

Al interior de una cueva, la penumbra obliga a desarrollar el sentido del habla y del oído para comunicarse mejor, es por ello que a las mujeres les resulta trascendente verbalizar su existencia y pueden sucumbir irremediablemente delante a un discurso amoroso a pesar que después de él se desaten pasiones inclonclusas o el abandono inexplicable.

Las mujeres logran mantener una conversación hablando al mismo tiempo porque cuentan con una codificación milenaria que tiene sus orígenes en las cuevas de las sociedades de cazadores.

Los hombres paleolíticos, por su parte, cuando acechaban a sus presas, precisaban de un lenguaje con señas realizadas con las manos para evitar el ruido en la caza, para ellos, el objetivo de la cacería estaba por encima de su individualidad ya que se trataba de la subsistencia del grupo..

La vida del Paleolítico duró al menos 40 MIl años, nosotros llevamos 5 Mil años de agricultura y con ella, las sociedades solares, machistas y monoteístas.

Esta estructura está desgastada, nuestros códigos morales se sustentan cada vez menos sobre las creencias religiosas y nuestro cotidiano se desplaza por la espiral del consumo irracional y la productividad por encima de la subsistencia.

Intentando generar riqueza, producimos escasez...

En tiempos de las cavernas, la propiedad era relativa y a nadie le interesaba acumular porque el espacio era colectivo y el cielo también era la casa de nuestros mayores. Observaban el tránsito de las luces estelares, el poder de la luz de la Luna, las abrasadoras sequías y las serpientes de luz que cayendo del cielo dejaban fuego como huella... eran tiempos donde todo ocurría al resguardo de la penumbra de las cavernas.

Antes de la agricultura, la alimentación humana se regía por las estaciones del año; la recolección y la cacería dependían del clima y en esos ritmos de la naturaleza se originaron los rituales y poco a poco los mitos. El fuego y las fogatas procuraron unidad, calor, abrigo, alimento, una barrera delante a los felinos y una tentación para los enemigos.

El éxito de las tribus dependía de la fuerza de sus tradiciones y de sus mitos porque son ellos los que crean el sentimiento de un grupo y construyen un escenario  donde el espíritu convive con la ferocidad y cuando juntos logran la unidad, se crea una imagen en la mente de los integrantes de la tribu y es ahí donde inicia la memoria ritual y religiosa de un grupo.

Pero llegó el tiempo en el que la cacería ya no fue abundante y la tierra empezó a ser cultivada, entonces Dios dejó de ser Mujer para volverse Hombre. Surgieron nuevos criterios que sometieron a la voluntad de las mujeres y al mismo tiempo nació la esclavitud, el machismo, los haremes y la plusvalía. Bajo estos cimientos fue que nació lo que orgullosamente llamamos "Civilización".

Nuestros ancestros siempre viajaron, hasta que de pronto la agricultura puso a todos quietos, desde entonces nos nutrimos con la misma alimentación independientemente de si hace frío o calor.

La agricultura tuvo éxito porque la acompañó una religión totalitaria que requirió sacrificios humanos; el sentido de grupo entonces fue inculcado como un "credo" y nunca más se transmitió como una experiencia energética.

Concluyo con otra Grafía Invisible de aquellos tiempos observando cómo nombramos a los equipos de Fútbol "Pumas", "Leones", "Tígres", "Águilas", "Jaguares", etc. cuando asistimos a un encuentro de nuestra selección o de nuestro equipo, una parte de nosotros se juega la vida en el campo como cuando en las cavernas de pronto había invasiones en nuestro terreno de vida por parte de feroces enemigos que iban en búsqueda del fuego o de las mujeres de nuestra comunidad y entonces hasta los menores observaban la batalla... esa memoria genética de la violencia, de la necesidad de sobrevivir del grupo, está en nuestros genes y es ahí cuando se entiende cómo es posible que en un estadio de fútbol la pasión llegue al límite y a veces a la violencia.

Espejos

La mente humana de los seres de las cavernas era exactamente igual a la nuestra, ellos ocuparon su potencial y sus necesidades religiosas estando en contacto con el cosmos, con las entidades, con las consciencias que en él habitan y con sus ciclos, nosotros construimos los instrumentos que nos permiten observar con lejana precisión el 4% de lo existente en el cosmos, el 23 se mide y se llama materia oscura... del 76% restante, no logramos siquiera imaginar qué es.

Estamos intercomunicados en una Red de individualidades donde podemos participar en espacios imaginarios en los que todo es bonito porque no existe la opción "no me gusta" y puedes acumular "amigos", ahí también hay grupos y son una expresión de aquellas Grafías Invisibles que pertenecen a "la mente de las cavernas" que configura nuestro cotidiano y más allá.