Por segundo año consecutivo fui invitado por la Universidad de Montreal para dictar una conferencia sobre las Profecías Mayas y presentar mi reciente trabajo de paráfrasis al texto jeroglífico del Monumento 6 de El Tortuguero --descifrado por el maestro Alfonso Arellano-- que resulta ser la única profecía escrita por los mayas históricos que hace referencia a la fecha 4 Ahau (en el calendario Tzolk’in) y 3 Kank’in (en el calendario Haab) y que equivale al final de la Cuenta Larga previsto para el 23 dic. 2012.
Monumento 6 de El Tortuguero (fragmento)
La profecía dice: Pasarán 13 ciclos de 144 000 días (que da un total de 1 872 000 días y que representa un ciclo de la Cuenta Larga que es igual a un poco más de 5 128 años) y llegará el 23 dic. 2012 (calendario gregoriano) entonces descenderá del cielo Bolom Yoc Te… la profecía debe leerse en el contexto de una serie de eventos que preceden a ésta parte del texto y que hablan de la vida, obras, conquistas y sacrificios que realizó el ahau (rey) Ah Puh Bahlum quien gobernaba la ciudad de El Tortuguero y que estaba emparentado con la dinastía de Palenque. Fue contemporáneo del célebre ahau Kinich Janaab’ Pakal K’in quien descansaba en una fastuosa tumba en el Templo de las Inscripciones, hasta que Alberto Ruz lo encontró.
Ah Puh Bahlum celebró la inauguración de un templo y el texto del Monumento 6 da cuenta de la relación que tenían los ahauob’ (reyes mayas) con sus dioses. En el Mundo Maya histórico, los dioses participaban en las actividades humanas y era común que al invocarlos con ritos y palabras sagradas, se presentaran en el ámbito humano.
Bolom Ok Té es un dios interesantísimo, aparece en el Vaso de los Siete Dioses justo en el momento de la Creación, asiste a la entronización del ahau K’inich Kan Balam (hijo de K’inich Janaab’ Pakal K’in) y es retratado en el Templo del Sol en Palenque, Bolom Ok Té lo ubicamos también en las esculturas que llamamos ángeles en la tumba del Kalomté (rey de reyes) U Kit Kan Lek’ Tok, ahau de Talol (Ek Balam) quien en el año 801 partió de nuestro plano existencial. Bolom Ok Té es un dios que aparece en momentos claves de la historia de los mayas, como un maestro de ceremonias que da inicio a la Cuenta Larga y también como testigo de momentos importantes en la vida y en la muerte de los ahauob’.
En escenas de Vasos Cilíndricos y Ceremoniales, ubicamos a Bolom Ok Té quien sorprendentemente tiene severos problemas con el Dios Conejo quien es solapado por la Diosa Luna y el Dios Hun Ahau para que realice travesuras a Bolom Ok Té, como despojarlo de sus vestimentas (lo cual era muy grave para un dios en el Mundo Maya histórico porque representaba su estatus), también es vejado y maltratado por el Dios del Maíz cuando es descubierto en actitud lujuriosa.
Ahora bien, en el Monumento 6 aparece su nombre como Bolom Yoc Té y no Bolom Ok Té ¿por qué? Yoc significa la unicidad o totalidad --entre otras definiciones--, así entiendo que es un Dios que representaba a la suma de los Dioses en momentos calendáricos sustanciales, es por ello que en otros vasos ceremoniales se le nombra Itzamnaaj que es el nombre de otro dios tutelar; sin embargo, también era denigrado y hasta golpeado por otros dioses, ese es el punto interesante, ya que los dioses mayas tenían una calidad divina en función del circular del tiempo, no eran omnipotentes sino que representaban flaquezas humanas así como el escarnio y el sometimiento, situaciones determinadas en función del Tonal (calidad de tiempo) que los mayas registraban.
En síntesis, estos son algunos comentarios sobre los tópicos que presenté como primicia en la Universidad de Montreal, dicté una conferencia de dos horas y media y la gente no se quería ir, preguntaban inquietos y estaban azorados con la majestuosidad de la Civilización Maya, me encontré con paisanos radicados en Montreal y que llevaban a sus hijos, uno de los niños se acercó al final de la conferencia y me dijo que estaba aprendiendo a contar como lo hacían los mayas con un libro que le regaló su papá, escuché a lo lejos que un joven quebequense le decía a sus amigos, qué mala noticia, sí los mayas no dijeron que el mundo se va a acabar, significa que voy a seguir trabajando…
La conferencia fue un éxito, me ofrecieron la sala principal con tres pantallas gigantes y tecnología de vanguardia, una hora antes de la conferencia la mitad de la sala se había llenado, los quebequenses preguntaban y preguntaban, no se querían ir, todos contentos y deseosos de visitar el Mundo Maya, pero ¿y los mayas? Ese es el punto, hablamos de los mayas, usufructuamos su conocimiento milenario, comercializamos sus espacios sagrados, viajo por el mundo presentando la Historia Maya, pero ¿y los mayas? ¿Dónde están los mayas?
Extiendo nuevamente una cordial invitación al gobierno estatal y a los gobiernos municipales, así como a la Industria Turística de Quintana Roo, para que apoyen a los mayas y una delegación maya pueda acompañarme en mis presentaciones en festivales, museos y universidades de Canadá, Italia y Colombia. No se trata de ayudarlos para que paseen conmigo, sino de dignificar su cultura, catalizar el interés mundial por el Mundo Maya y, de paso, mejorar nuestra maltratada imagen turística mundial. No hay inversión para la promoción turística, ya bajamos del décimo al doceavo puesto como destino turístico mundial, es increíble que las universidades canadienses y colombianas, me ayuden a la promoción turística y que ningún gobierno mexicano me apoye, pero el asunto nodal, se ubica en que hablamos de los mayas, de su historia y de su filosofía, consecuentemente: que también los mayas hablen de su cultura. Es una inversión turística que genera riqueza y dividendos a diversos sectores de nuestra sociedad. Gracias.