Los símbolos anteriores a la
escritura unifican lo existente con lo pensable.
João Osaka .
¿Quiénes son los chamanes?
Antes de que la energía eléctrica bañara con su luz lo que
alcanza a cubrir nuestra mirada, las sombras danzaban y nunca estaban quietas.
En aquellos lejanos soles, los eventos de las sombras eran considerados tan
importantes como los que acontecen en la luz: los seres humanos razonaban y
ensoñaban…
Nuestros mayores sostuvieron un íntimo diálogo con las fuerzas
de la naturaleza, percibieron los secretos de las sombras y rindieron culto a
lo que nuestra mente racional llama "fantasías...”. A través del trance o
del éxtasis, los chamanes localizaban un espacio energético, lo ritualizaban
para volverlo tangible y en la oscuridad de las cuevas reconocían los secretos
de la impermanencia y del movimiento.
En Corea del Sur, existen 50 mil chamanes registrados en el
gobierno, pagan impuestos y sus prácticas constituyen una verdad en el
inconsciente colectivo de los surcoreanos. Algunos pueblos de origen maya, como
los tzotziles en Chiapas, realizan sincréticas prácticas chamánicas en la
Iglesia de San Juan Chamula, recuperan trazos de un pasado milenario, lo
adaptan a su cotidiano y exorcizan conciencias inorgánicas con eructos de Coca
Cola.
Occidente ve con prejuicio y fuera de foco a los chamanes, su
nombre y esencia se desvirtúa y condiciona a la plusvalía que genera el turismo
de masas; en el otro extremo y ocupando el vacío que produce la ignorancia, la
pérdida de Fe y la desinformación: cualquiera que toma un tambor, tres plumas,
ingiere ayahuasca y danza alrededor de una fogata: ya se dice chamán.
Los chamanes de la antigüedad fueron Mujeres y Hombres de
Conocimiento que fungían como doctores del alma y comulgaban con sus “entidades
divinas” para mantener orden y equilibrio en sus sociedades. Fue un tiempo
(Tonal) en el que las mentes no estaban regidas por los dogmas religiosos… su
atención se concentraba en respetar los tabúes y negociar con los caprichos de
las entidades divinas... El chamanismo ha evolucionado, los linajes se han
deconstruido; hoy, el chamanismo, es un asunto sustancialmente “práctico”.
¿A DÓNDE?
El chamanismo se originó hace 14 mil años en el frío boreal,
territorio que hoy ocupan Escandinavia, Rusia, Alaska, Groenlandia y Canadá,
particularmente en Asia, en la región llamada Manchuria; en aquellas extensas
llanuras que antiguamente estuvieron cubiertas de hielo, surgió una tradición
chamánica que después emigró hacia el Continente Americano.
Chamán es una palabra de origen siberiano y quiere decir “el que
sabe”, entendiendo “saber” como el acto de “ver”o “conocer”. El chamán es “el
que sabe viendo o ve y por ello sabe”. Era un vínculo con las entidades divinas
porque las veía de frente, también podía ir en búsqueda de las almas perdidas
de quienes se enfermaban y buscándolas las “veía” vagabundeando en la otredad o
aprisionadas, entonces peleaba por ellas o negociaba las almas de los suyos con
poderosas fuerzas y conciencias inorgánicas
Los chamanes transgredían los planos de conciencia racional y su
elección era un designio. En tiempos chamánicos nadie en su sano juicio deseaba
ser un chamán; sin embargo, no había manera de evitarlo, cuando era señalado
por las fuerzas de la naturaleza para ser un chamán, el niño y su familia
advertían el sufrimiento que les aguardaba, estaba claro que tendría que pasar
por un duro proceso de adiestramiento y morir en vida… de no hacerlo bien, lo
haría en varias ocasiones.
En la mayoría de las tradiciones
culturales, los chamanes trascendieron el orden del mundo material, coquetearon
con la esquizofrenia, curaron a los integrantes de su comunidad y se
mantuvieron al margen de la lucha física del Poder. Fungieron como consejeros
de los gobernantes, sin embargo, no siempre fue así: los olmecas y los
teotihuacanos tuvieron gobiernos dirigidos por chamanes, los mayas crearon una
“monarquía” en la que los ahauob’ (reyes mayas), gobernaron con rituales
chamánicos valiéndose de la palabra hablada e inscrita.
Durante miles de años las sociedades humanas dedicadas a la
pesca, recolección y cacería, comulgaron con las entidades divinas y el
universo se interpretó energéticamente bajo la premisa de respetar los “tabúes”
sociales y los “acuerdos” con el mundo de las almas (de animales y ancestros).
Al menos por 35 mil años, los seres humanos veneraron a una Diosa Madre quien se transformó en un Dios Padre cuando
inició la agricultura. El excedente de producción creó la necesidad de mano de
obra y, al conseguirla por la fuerza, surgieron la esclavitud, la sumisión
femenina, los harenes, los hijos bastardos, la plusvalía, el consumo
irreflexivo, el machismo y, en consecuencia, la simulación y el cinismo se
establecieron en el Poder… nuestro desatino es milenario.
En Mesoamérica, las sociedades agrícolas mantuvieron la
presencia de rituales chamánicos y el supuesto politeísmo que registraron los
misioneros peninsulares, en realidad son expresiones de sofisticadas prácticas
chamánicas. Oficialmente se reconoce a la sociedad olmeca como la primera
civilización mesoamericana; los olmecas no fundaron un imperio, fueron
distintos pueblos de origen olmeca poseedores de un original y común bagaje
mitológico, tecnológico y militar; progresaron en un amplio territorio con una
estructura socioeconómica sustentada en el cultivo del maíz y en un gobierno
divino.
Tuvieron características somáticas distintivas como los ojos
almendrados, la nariz ancha y chata, prominentes labios y fisonomía mestiza
entre asiáticos y negroides. Aunque en el Golfo de México se localizan sus
principales Centros Ceremoniales, esparcieron su cultura desde Mezcala,
Guerrero, hasta la Huasteca Veracruzana, desde Morelos hasta El Salvador y
desde Chiapa de Corso hasta Kantunilkín.
¿Kantunilkín es olmeca y maya?
Nuestra precaria, fragmentada y
distorsionada interpretación histórica presenta a las culturas precolombinas
como quien juega a la lotería y “canta” las cartas de manera aislada cuando en
realidad se trata de un mosaico cultural en el que existe una línea de
continuidad histórica desde los olmecas hasta los aztecas.
Si existen registros de ocupación olmeca
en Oaxaca, Guerrero, Chiapas, Honduras, El Salvador entre otras regiones de la
antigua Mesoamérica ¿por qué no habría en Quintana Roo? Hoy sabemos que los
mayas heredaron un bagaje cultural de los olmecas y luego lo sublimaron. En
algunos lugares como Chiapa de Corso, se registra con claridad esa transición olmeca-maya.
Simplemente nos faltaba encontrar un lugar en la Península de Yucatán que
presentara características olmecas para entonces oficialmente anexar a la
Península de Yucatán al área olmeca.
Relieves de El Relato de Xibalbá-Pack Ch'en
En los alrededores de Kantunilkín
se localiza la Gruta Xibalbá-Pak Ch’en, una sagrada oquedad que desde hace
décadas es reconocida por los pobladores mayas de la región como un lugar
sagrado (para resguardarla, su
ubicación se mantiene en secreto a petición de Don Juan Cab’, dueño del
terreno). El Dr. Dominique Rissolo, realizó una registro iconográfico en 1997,
dibujó tres bocetos en los que aparecen unas máscaras, unos garabatos, unos
rostros y un individuo; recolectó
algunos tiestos que fueron estudiados y clasificados ubicando hacia el año 700
a. C la primera ocupación y hacia el 600 d. C la última.
Invitado inicialmente por unos
amigos periodistas y luego por mis amigos mayas, durante 5 meses he investigado
el contenido de los relieves de la Gruta de Xibalbá-Pak Ch’en y las
conclusiones de ésta primera temporada de investigación son realmente
sorprendentes: descubrí que se trata de un Relato Mitológico de origen
chamánico realizado por artistas-chamanes olmecas y es remarcable que el
contenido no fue alterado por los mayas, lo cual nos abre un novedoso sendero
de investigación. La realidad epigráfica nos muestra que algunos siglos antes
de la era cristiana, los mayas retomaron los rituales chamánicos que iniciaron
los olmecas y así también lo confirma las dataciones que arrojan la cerámica
estudiada y clasificada por el Dr. Rissolo.
Ingreso a la Gruta Xibalbá-Pak Ch'en
Los registros públicos indican que antes
de mi investigación, únicamente el fotógrafo Stephen Alvarez y el Dr. Rissolo,
habían visitado, fotografiado y publicado algunos dibujos y fotografías de
pequeños fragmentos de los relieves ubicados en la Gruta de Xibalbá-Pak Ch’en. Ciertamente,
las condiciones de oscuridad y declive impiden percibir y fotografiar los
diseños, además, la luz del flash aplana los relieves aunque también nos revela
rastros de pintura.
Reflexionando que las sombras que
veían los olmecas y los mayas, danzaban (ya que iluminaban con candelas o teas
humeantes), iluminé con una vela los diseños para verlos como los veían
nuestros mayores y fue entonces cuando descubrí que los creadores de El Relato
de Xibalbá-Pak Ch’en utilizaron un
lenguaje plástico tridimensional valiéndose del relieve, la pintura y el bajo
relieve. Cuando me percaté que con la luz de las lámparas y la de los flashes,
se ve menos que con las velas, inicié
un largo proceso de iluminación indirecta y para mi sorpresa: después de
siglos, volvieron a ser vistos los registros chamánicos de nuestros mayores.
Iluminación con velas en la Gruta de Xibalbá-Pak Ch'en
Se trata de diseños, ideas, criterios, rituales, creencias
y mitos, que fueron esculpidos, pintados e insertados en la piedra hace 2700
años; es fantástico darnos cuenta que las piedras sagradas y los símbolos de
nuestros ancestros, han despertado de un oscuro silencio para darnos luz sobre
los orígenes de nuestros mayores y, descubriendo la intención de sus
expresiones artísticas, ubicamos el sentido ritual de su existencia y los
orígenes chamánico-boreales de algunos de sus mitos que después de siglos y
transfiguraciones, aún reposan en nuestras mentes. Así es, tanto en las mentes
de los descendientes de los mayas, como en las mentes de los mestizos ya que
los mitos saltan entre las culturas. Tal es el caso del mito del “Okol Pal” de
la zona maya que los mestizos llamamos “Robachicos” y en Quebec, Canadá, aún se
le conoce como “El Buen Hombre de las 7 de la Tarde”. En próximas entregas,
presentaré la imagen de un niño ingresando a la boca de una serpiente, ritual
que se aprecia los Relieves del Altar Principal de la Gruta de Xibalbá-Pak
Ch’en y que se relaciona con el mito del Robachicos.
En la Gruta de Xibalbá-Pak Ch’en, se ubica un
Relato Mitológico-Chamánico esculpido, tallado y pintado por chamanes olmecas
(los rostros de los personajes esculpidos, las máscaras, las dataciones, los
rituales, los Actos de Poder, la ausencia de rostros mayas y la iconografía,
así lo evidencian). Es único en su género, en ninguna otra parte de Mesoamérica
se ha encontrado un conjunto de imágenes tan antiguo y tan completo que narre
rituales y apariciones de wayob’ (naguales o coesencias). Agradezco a mis
amigos mayas Don Juan Cab, Carlos Poot, Germán Pool y a toda la familia Cab, la
oportunidad que me brindaron para estudiar El Relato de la Gruta de Xibalbá-Pak Ch’en. Próximo
domingo platicaremos de las cuevas olmecas de Oxtotitlan y Juxtlahuaca, que
fueron relativamente contemporáneas de la Gruta de Xibalbá-Pak Ch’en y en
ellas, también encontramos rituales chamánicos. Bienvenidos a la búsqueda de
los orígenes de lo primero…
Interesantísimo!!!
ResponderEliminarMuchas gracias por compartir algo tan maravilloso.
Soy un salvadoreño apasionado por las culturas ancestrales principalmente olmeca y maya y por eso aprecio muchísimo su aporte.
Un abrazo fraternal
Interesantísimo!!!
ResponderEliminarMuchas gracias por compartir algo tan maravilloso.
Soy un salvadoreño apasionado por las culturas ancestrales principalmente olmeca y maya y por eso aprecio muchísimo su aporte.
Un abrazo fraternal