Misterios y Descubrimientos
¿Artistas Neandertales?
En los laboratorios
BETA ANALITYC de Miami, USA, entre 2010 y 2011, se realizaron las dataciones de
unos carbones recuperados en una fogata de la Cueva de Nerja, situada en
Málaga, España y dieron la extraordinaria fecha de 43 000 a 45 000 años. José
Luis Sanchidrián, profesor de Geografía de la Universidad de Córdoba y director
del proyecto de investigación de la cueva de Nerja, declaró en una entrevista
al periódico español Público: “Atendiéndonos a las fechas y los paradigmas de
poblaciones de Europa por los sapiens, esos carbones los llevaron allí los
neandertales”. Manuel Pimentel, exministro de Trabajo español mencionó
jubiloso: “Es un descubrimiento cósmico”.
¿Cuál es el motivo de
tanta alegría delante a los restos de una fogata que realizaron los
neandertales hace poco más de 40 000 años si desde hace 2 millones de años los
homínidos Homo ergaster dominaban el
fuego? Pues que junto a la fogata se encontraron los dibujos de unas focas lo
cuál indicaría que los Neandertales pudieron ser los primeros artistas.
El descubrimiento
tiene varias aristas y deja las puertas abiertas para desarrollar algunas
interpretaciones y varias conjeturas que podrán ser completamente esclarecidas
dentro de muy poco cuando se publiquen los análisis de Uranio-Torio realizados
por la geóloga francesa Eswige Pons-Branchu en las estalactitas de la cueva de
Nerja y científicamente se compruebe si aquellas focas fueron realmente
dibujadas por los neandertales.
Existe la posibilidad
de que ciertamente, la fogata fuera obra de los neandertales, pero las pinturas
pudieran haberse realizado algunos miles de años más tarde por nuestros
ancestros directos y no por nuestros tíos abuelos.
La cueva de Nerja
contiene 596 representaciones pictóricas que incluyen caballos, ciervos, cabras
y aves acompañados de signos que algunos investigadores como el conservador de
la cueva, Antonio Garrido, explican que pudieran ser los primeros rastros de un
lenguaje escrito o codificado.
Las cuevas y grutas
han sido desde tiempos sin memoria pétrea, los espacios sagrados de comunión
con el universo chamánico, resguardo para las andanzas y las peregrinaciones
humanas; vínculo con lo innombrable y espacios comunitarios donde las mujeres
desarrollaron la capacidad de hablar todas al mismo tiempo sin perder el hilo
de la conversación; en la penumbra criaron entre sus brazos a sus descendientes
aguardando a sus hombres quienes en silencio recorrían las planicies y
acechaban a sus presas con un lenguaje gestual. Desde entonces, los hombres
somos tremendamente visuales y las mujeres atienden a los sonidos y a las
voces.
No siempre se
representaron en las cuevas y en las grutas a los animales que se cazaban,
también existieron figuras que relacionaban a los seres humanos con el universo
mágico y los animales totémicos. Pero en el caso de la Cueva de Nerja, resulta
sorprendente encontrar a seis focas dibujadas en las estalactitas de en un
camarín oculto en el fondo de la cueva y de complicadísimo acceso aún para los
espeleólogos modernos.
Desde el hace más de
40 mil años, ese reducido espacio fue visitado por los neandertales,
seguramente también frecuentado por los cromagnones quienes por situaciones
propias de la evolución, lucharon por la permanencia como especie contra los neandertalesl
y los eliminaron del planeta. Si fuera entonces una representación artística de
los neandertales, evidenciaría un elemento sustancial en el desarrollo psíquico
y mágico de nuestros tíos abuelos que se sumaría a los hechos y registros ya
comprobados de que cuidaban a sus enfermos y realizaban prácticas funerarias;
demostrando en sus rituales, una percepción de otras realidades paralelas que
los vinculaban con la magia y la otredad. De igual manera, el arte entonces no
sería exclusivo de nuestra especie y pondría en tela de juicio a nuestra
interpretación homocéntrica que oronda establece que todo lo que se produjo a
partir del lenguaje y de las expresiones sublimes del alma: son exclusivas de nuestros
ancestros.
Ese es ya un tremendo
asunto, pero observo igualmente otro detalle sustancial: el hecho de que en lo
más recóndito de la cueva se ubiquen animales marinos en movimiento… ello inquieta
a mi percepción y me conduce al límite de la evidencia para concluir que
probablemente, desde aquellos lejanos tiempos, los neandertales como los cromagnones,
tenían la percepción del desplazamiento marino, sea porque pudieran nadar o tal
vez deseaban desplazarse por la superficie de los océanos cubiertos de hielo ya
que en aquellos lejanos y fríos soles, las cálidas costas españolas y francesas
estaban próximas a los glaciares.
El 22 de marzo del año en curso en la sección Misterios y Descubrimientos de este Blog, comenté los pormenores e implicaciones del fastuoso
descubrimiento que realizaron los buzos Alejandro Álvarez, Fanco Atollini y
Alberto Nava en El Hoyo Negro de Tulum, dimos cuenta de que ubicaron unos
restos humanos acompañados de animales prehistóricos situados al menos hace 20 mil
años o quizá mucho más, éste descubrimiento de los buzos
independientes de Quintana Roo pudiera fortalecer la hipótesis de los investigadores Bruce Bradley
y Dennis Stanford quienes sugieren un origen milenario y europeo para algunos
de los primeros pueblos que habitaron el Continente Americano.
Bradley y Stanford sustentan su revolucionaria hipótesis en un estudio comparativo de las técnicas practicadas en el tallado de piedras entre la Cultura Solutrense de Europa y la Cultura Clovis de América, teniendo a Cactus Hill, en Virginia, USA, como un yacimiento intermedio entre ambas culturas. Es una hipótesis que hace temblar a las estructuras de la interpretación tradicional, incomoda la zona de confort de los investigadores que se estacionan en los esquemas y reniegan a priori cualquier novedad que desestabilice sus privilegios y el supuesto derecho de interpretación oficial. Esperemos atentos los reportes franceses de Uranio-Torio, es probable que tengamos que volver a escribir la Historia desde sus cimientos. Coc.